El Congreso FIT sirve de plataforma para que las mujeres de las TI intercambien experiencias. La ponencia principal de la doctora Rebekka Reinhard llevará por título: Mujeres, no tengáis miedo al poder.
"Es cierto que hay mujeres cuyo cerebro es tan grande como el de cualquier hombre", escribió el filósofo y filántropo británico John Stuart Mill en 1869. "Sé que un hombre que pesó varios cerebros humanos declaró que el más pesado que se había encontrado... era el de una mujer". Mientras tanto, la investigación ha hecho algunos progresos. Ahora sabemos que las mujeres no sólo son capaces de realizar asombrosas proezas de pensamiento. Son capaces de mucho más. Hoy en día, hay mujeres líderes empresariales, rectoras y premios Nobel.
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Acerca de Rebekka Reinhard
Trabajó durante doce años como consejera filosófica para particulares; también trabajó durante ocho años con pacientes con depresión y burnout en el Hospital Universitario Ludwig Maximilian de Múnich y con pacientes oncológicos. Es editora de la revista de filosofía Hohe Luft y autora de bestsellers de Spiegel (entre ellos "Die Sinn-Diät" y "Würde Platon Prada tragen?"). Recientemente ha publicado su sexto libro, titulado "Kleine Philosophie der Macht (nur für Frauen)", del que se ha extraído este fragmento. En el Congreso FIT, impartirá una conferencia magistral sobre "El poder es femenino".
[www.philosophyworks.de ]
[www.rebekkareinhard.de ]
¿Qué es la mujer moderna?
Una criatura muy compleja con numerosos intereses. Muchas de ellas empiezan por "M": moda, maquillaje, magdalenas, maratones, hombres. El poder tiende a no ser uno de ellos. De hecho, ¿por qué no? La palabra latina para poder es "potentia". El poder significa la potencia para efectuar y cambiar algo. Las relaciones con las cosas y las personas, la vida en su conjunto. El poder es la clave de la felicidad y la libertad. Y, sin embargo, todavía hoy nos da miedo. Del poder de los demás, pero sobre todo de nuestro propio poder. Si queremos cambiar esto, debemos dejar la posición de impotencia en dirección al poder. Para ello, no necesitamos ni algoritmos ni órdenes militares ni una escopeta de bombeo. Sólo necesitamos las herramientas de poder adecuadas. He aquí una selección:
- Herramienta de poder nº 1: Libérate del excesivo perfeccionismo, en el que la palabra "tengo que" juega un papel central. Deja de pensar "En realidad quiero hacer esto, en realidad quiero hacer aquello... pero desgraciadamente tengo que hacer aquello". En su lugar, hágase la pregunta filosófica básica: "¿Para qué vivo?". Ni siquiera intentes encontrar la respuesta perfecta. Deja que la pregunta se asimile: independízate de las opiniones de los demás y asume la responsabilidad de tu vida.
Herramienta de poder nº 2: Deja de apresurarte, da zancadas por la vida. La rápida marcha de las mujeres competitivas no es un signo de poder, sino de impotencia. Haz todo lo que haces más despacio. Apaga la respiración brusca. Descubre los beneficios de la lentitud. Las plantas no crecen más rápido cuando se tira de ellas. Dale a las cosas y a las personas -incluido tú mismo- tiempo para crecer y madurar. Y encontrar posibilidades y soluciones a problemas que permanecen ocultos en un estado de estrés permanente. Poderosa no es la mujer que trata de forzar todo ayer. Pero el que tiene la soberanía de esperar y confiar. Herramienta de poder nº 3: No te dejes subyugar por estereotipos de género anticuados (por ejemplo, "las mujeres son bien portadas y silenciosas"). Demuestra tu potencia, sobre todo si trabajas donde los hombres están al mando. Señalar la Tolerancia Cero en cada conferencia y reunión a las personas que aún viven en los años 50. Sea uno de los primeros en hablar. Y: Insiste en los derechos de autor de tus pensamientos. Sé valiente. Hazlo por ti. Y para sus colegas, amigos, hijas. El poder es bueno.
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