Cuando hablamos de datos en segundo plano nos referimos a aquella información que se está utilizando en una aplicación mientras ésta se encuentra en segundo plano o en reposo, es decir, sin estar abierta. Por ejemplo, si tenemos una app de noticias y la tenemos abierta, estamos utilizando datos en primer plano, pero si la cerramos y seguimos recibiendo notificaciones y actualizaciones de noticias, estamos utilizando datos en segundo plano.
Desactivar los datos en segundo plano puede ahorrar una cantidad significativa de datos móviles, lo que puede resultar en una factura de teléfono más baja. Sin embargo, esta acción puede tener algunas consecuencias. Al desactivar los datos en segundo plano, es posible que algunas aplicaciones no funcionen correctamente, ya que no tendrán acceso a la información en tiempo real. En algunos casos, las aplicaciones podrían no recibir notificaciones y actualizaciones.
En cuanto a cuál es la aplicación que más consume datos, esto puede variar dependiendo del uso que le demos a nuestro smartphone. Las aplicaciones de redes sociales, como Facebook, Instagram y Twitter, suelen ser las principales consumidoras de datos en segundo plano. Las aplicaciones de música y video también pueden consumir grandes cantidades de datos, especialmente cuando se utilizan en modo de streaming.
Para no gastar tantos datos, existen varias opciones. Una de ellas es desactivar los datos en segundo plano para las aplicaciones que no necesiten estar funcionando constantemente en segundo plano. Otra opción es utilizar aplicaciones que compriman los datos, como Opera Mini y Google Chrome Data Saver. También podemos configurar nuestro smartphone para que solo actualice las aplicaciones cuando estemos conectados a una red Wi-Fi.
La opción de restringir el uso de datos nos permite limitar el consumo de datos de una aplicación en particular. Esto puede ser útil si una aplicación está utilizando una gran cantidad de datos en segundo plano y queremos reducir su consumo. Al restringir el uso de datos, la aplicación solo podrá utilizar datos cuando se encuentre en primer plano.
Las aplicaciones en segundo plano son aquellas que se mantienen funcionando en segundo plano, incluso cuando no las estamos utilizando. Algunos ejemplos de aplicaciones en segundo plano son las aplicaciones de correo electrónico, las aplicaciones de redes sociales y las aplicaciones de noticias.
Por último, el uso de datos sin restricción significa que una aplicación puede utilizar la cantidad de datos que necesite, tanto en primer plano como en segundo plano. Esto puede resultar en un consumo significativo de datos y, por lo tanto, en una factura de teléfono más alta. Es recomendable revisar la configuración de cada aplicación y limitar su consumo de datos si es necesario.
Algunas aplicaciones que generalmente gastan menos datos son aquellas que no requieren una conexión constante a Internet, como aplicaciones de notas, calculadoras y juegos que no dependen de la conexión en línea. También hay algunas aplicaciones que ofrecen la opción de reducir el consumo de datos en su configuración, como aplicaciones de correo electrónico y redes sociales. Sin embargo, el consumo de datos de cualquier aplicación depende de cómo se use y de la cantidad de contenido que se descargue o se cargue en ella.
Según varios estudios, Netflix gasta más datos que YouTube debido a que su contenido es transmitido en una calidad más alta y requiere una mayor cantidad de ancho de banda para una reproducción fluida. Sin embargo, ambos servicios pueden consumir grandes cantidades de datos si se utilizan con frecuencia y en una calidad alta.
La red social que menos consume datos es Twitter.