Friedrich Nietzsche fue un filósofo alemán que propuso un concepto interesante llamado «irracionalismo». Para Nietzsche, la razón y la lógica no son suficientes para entender la complejidad del ser humano y su existencia. La vida no es algo que se pueda explicar completamente con la razón, sino que hay otros factores como la emoción y la intuición que también juegan un papel importante. El irracionalismo, por lo tanto, es la idea de que la razón no es suficiente para entender la vida y que debemos buscar otros medios para hacerlo.
En cuanto a las emociones, Nietzsche creía que había dos tipos: las emociones positivas y las emociones negativas. Las emociones positivas son aquellas que nos hacen sentir bien, como la felicidad, el amor y la alegría. Las emociones negativas son aquellas que nos hacen sentir mal, como la tristeza, la ira y el miedo. Según Nietzsche, no debemos temer las emociones negativas, ya que son necesarias para nuestro crecimiento y desarrollo como seres humanos.
En cuanto a la racionalidad, Nietzsche creía que un ser humano racional era aquel que podía equilibrar su razón y sus emociones de manera efectiva. Un ser humano racional no debería reprimir sus emociones, sino aprender a controlarlas y utilizarlas de manera efectiva. El pensamiento irracional, por otro lado, es aquel en el que las emociones dominan el proceso de pensamiento y la razón no tiene un papel importante.
Un ejemplo de pensamiento irracional sería cuando alguien toma una decisión basada únicamente en una emoción, sin considerar los hechos o la lógica detrás de la situación. Por otro lado, el pensamiento racional es aquel en el que la razón es la fuerza motriz detrás de la toma de decisiones y las emociones son consideradas y controladas de manera efectiva.
En resumen, el irracionalismo según Nietzsche es la idea de que la razón no es suficiente para entender la vida y que debemos buscar otros medios para hacerlo. Las emociones son un factor importante en la vida humana y debemos aprender a controlarlas de manera efectiva para ser seres humanos racionales. El pensamiento irracional se basa en las emociones, mientras que el pensamiento racional se basa en la razón y la lógica.
El amor desde lo racional puede entenderse como un sentimiento que surge a partir de una evaluación objetiva y consciente de las cualidades positivas de otra persona, y que se mantiene gracias a la voluntad y a la decisión de seguir amando pese a las dificultades o circunstancias adversas. Según esta perspectiva, el amor racional no depende de la pasión o de la emoción desmedida, sino que se basa en una valoración consciente y crítica de las características y acciones del ser amado.
El artículo no trata específicamente del tema del amor egoísta, por lo que no puedo proporcionar una respuesta relacionada con el contenido del artículo. Sin embargo, puedo decir que el amor egoísta se refiere a un tipo de amor que se centra únicamente en uno mismo y en la satisfacción de las propias necesidades y deseos, sin tener en cuenta los sentimientos y necesidades de la otra persona involucrada en la relación. Este tipo de amor puede ser considerado como egoísta y poco saludable para una relación duradera y satisfactoria.
El artículo «El Irracionalismo según Nietzsche y la importancia del pensamiento racional» no aborda directamente el tema del amor pasional, por lo que no hay una respuesta específica a esa pregunta dentro del texto. Sin embargo, se podría decir que, desde la perspectiva de Nietzsche, el amor pasional probablemente sería visto como una expresión del instinto y la emoción, en contraposición al pensamiento racional que él consideraba fundamental para el desarrollo del individuo y la sociedad.