AWS Fargate es un motor de computación sin servidor desplegado en la nube. Se dice que el servicio admite un desarrollo de apps seguro y sencillo.
Descrito en una frase, AWS Fargate es un potente motor de computación sin servidor para ejecutar contenedores utilizados para aplicaciones. En la computación en nube, un contenedor es una instancia aislada que proporciona de forma flexible la potencia de cálculo necesaria. Como reside en la nube, los administradores de TI de la empresa proveedora no tienen que preocuparse por la gestión de la infraestructura cuando utilizan AWS Fargate. Esto ahorra tiempo y conserva los recursos humanos.
Fargate es proporcionado por Amazon Web Services (AWS). El servicio facilita el cumplimiento de los requisitos de la aplicación en el desarrollo de la misma. Como máquina de procesamiento de datos sin servidor, el sistema funciona con Amazon Elastic Container Service (ECS), así como con Amazon Elastic Kubernetes Service (EKS).
Disponibilidad de los datos de forma permanente y segura
Las empresas que planean utilizar los servicios en la nube para desarrollar aplicaciones para el usuario final o que quieren lanzar una aplicación interna por sí mismas suelen enfrentarse a una serie de problemas no resueltos. Por ejemplo, a menudo no es fácil nombrar el número de futuros usuarios. Desde unos pocos interesados de un nicho de público hasta descargas de seis o siete cifras, muchas cosas son posibles. En todos los casos, el reto técnico es permitir la disponibilidad permanente de los datos necesarios y, al mismo tiempo, poder garantizar una usabilidad limpia y sin brechas de seguridad.
AWS Fargate ayuda a simplificar el uso de Amazon Elastic Container Service. Amazon Elastic Container Service se utiliza para administrar contenedores y se considera el corazón de Amazon AWS para la entrega de aplicaciones. Aquí, cada contenedor puede aislar una aplicación, lo que garantiza que se eviten los riesgos de seguridad y se consiga el mayor rendimiento posible. Tanto el aprovisionamiento como la gestión de los servidores se vuelven redundantes gracias a AWS Fargate. Al mismo tiempo, se pueden definir y facturar los recursos requeridos por los respectivos usuarios. Gracias al aislamiento integrado de las aplicaciones, los ataques desde el exterior son prácticamente imposibles.
Pago por uso
Como las necesidades de los usuarios de las aplicaciones cambian rápidamente y se desarrollan constantemente nuevas normativas para sectores específicos, la gestión de la infraestructura informática usada es cada vez más difícil. Para responder a las demandas siempre cambiantes del desarrollo de aplicaciones, se ha implementado AWS Fargate. Sirve para que los desarrolladores de aplicaciones vuelvan a sus tareas principales y se liberen del tedioso trabajo administrativo. Para ello, AWS Fargate se encarga de asignar la cantidad adecuada de capacidad de procesamiento de datos y elimina la selección de instancias y el escalado de la capacidad del clúster, que de otro modo serían necesarios. Además, sólo se factura la cantidad de recursos realmente necesarios para el funcionamiento de los contenedores. De este modo, pueden evitarse los elevados costes de aprovisionamiento, así como la adquisición de servidores adicionales.