También conocidos como co-robots, o más simplemente como robots colaborativos, los cobots son herramientas que interactúan con los empleados dentro de la empresa
Al hablar de Industria 4.0, no se puede dejar de mencionar a los cobots. También se denominan co-robots, o en italiano simplemente robots colaborativos. Son máquinas inteligentes capaces de interactuar y colaborar con empleados humanos dentro de un mismo espacio de trabajo compartido.
Se les considera los robots industriales del futuro y contrastan con las máquinas utilizadas desde los años 40 en las industrias de todo el mundo. En el pasado, los robots estaban diseñados para realizar su trabajo de forma autónoma, a menudo sin necesidad de intervención humana. En la Industria 4.0, sin embargo, el objetivo es crear máquinas que puedan interactuar con el componente humano de una empresa de forma que el trabajo sea más eficiente para ambas partes. Los cobots fueron inventados en 1996 por J. Edward Colgate y Michael Peshkin, dos profesores de la Universidad Northwestern de Illinois.
Robots colaborativos
La idea de los robots colaborativos, sin embargo, nació unos años antes, en 1994, a partir de un proyecto financiado por General Motors. El objetivo era crear máquinas autosuficientes que fueran similares a las personas y que pudieran interactuar con ellas de forma compleja. Los primeros cobots se hicieron para la seguridad, dentro de las empresas o espacios compartidos, de las personas. No tenían potencia motriz y era el ser humano, mediante el uso de periféricos o paneles de control especiales, quien gestionaba sus movimientos. Con el tiempo, también se han desarrollado cobots con la capacidad de moverse dentro de ciertos espacios. General Motors, que desde hace años utiliza estos androides en la gestión de materiales industriales y el montaje de componentes de automóviles, los define como Dispositivos de Asistencia Inteligente (DAI). Estos sistemas recibieron una norma de seguridad por primera vez en 2002 y fue actualizada en 2016.
El mercado de los cobots
Además de General Motors, muchas otras empresas han invertido en robots colaborativos. Por ejemplo, Cobotics comenzó su producción en 2002. Universal Robots ha lanzado varios cobots desde 2008. Entre los más famosos están el UR5 y el UR10, además de un robot de sobremesa llamado UR3. Aunque el más conocido de la empresa es Baxter, uno de los primeros cobots industriales similares a los actuales, que fue lanzado por Universal Robots en 2012. FANUC, la principal empresa de fabricación de robots del mundo, también comenzó a invertir en cobots desde 2015.