Las variables dependientes son un concepto fundamental en la investigación científica, ya que permiten evaluar el efecto que tiene una variable independiente sobre otra variable. Según Sampieri, la variable dependiente es aquella que se mide o se observa para evaluar el efecto de la variable independiente. Es decir, es la variable que se ve afectada por la variable que se está estudiando.
Para hacer una variable cuantitativa, es necesario que la variable tenga una escala de medición numérica. Esto significa que se pueden asignar valores numéricos a las diferentes categorías de la variable. Por ejemplo, se puede medir la edad de una persona en años, asignando un número a cada edad. De esta manera, se pueden realizar operaciones matemáticas con los datos.
Por otro lado, las variables cuantitativas ordinales son aquellas que tienen una escala de medición numérica ordenada. Es decir, las categorías de la variable se pueden ordenar de manera creciente o decreciente. Por ejemplo, se puede medir el nivel de satisfacción de un cliente en una escala del 1 al 5, donde 1 es «muy insatisfecho» y 5 es «muy satisfecho». En este caso, las categorías se pueden ordenar en función de su valor numérico.
Las variables ordinales son aquellas que tienen una escala de medición no numérica, pero que se pueden ordenar de manera creciente o decreciente. Por ejemplo, se puede medir la calidad de un producto en una escala del 1 al 5, donde 1 es «muy baja» y 5 es «muy alta». En este caso, las categorías no tienen un valor numérico, pero se pueden ordenar en función de su calidad.
Las variables nominales y ordinales son aquellas que tienen una escala de medición cualitativa, es decir, no numérica. Las variables nominales son aquellas que se pueden clasificar en diferentes categorías, pero estas categorías no se pueden ordenar de manera creciente o decreciente. Por ejemplo, se puede clasificar a las personas según su género, pero no se puede decir que el género masculino es mayor o menor que el género femenino.
Finalmente, las variables continuas son aquellas que pueden tomar cualquier valor dentro de un rango determinado. Por ejemplo, la altura de una persona puede tomar cualquier valor entre 1 metro y 2 metros. En este caso, no se pueden asignar valores numéricos a las diferentes categorías, ya que la variable puede tomar cualquier valor dentro del rango.
En conclusión, las variables dependientes según Sampieri son aquellas que se ven afectadas por la variable independiente. Las variables cuantitativas y ordinales tienen escalas de medición numérica y ordenada, respectivamente, mientras que las variables nominales y ordinales tienen escalas de medición cualitativas. Por último, las variables continuas son aquellas que pueden tomar cualquier valor dentro de un rango determinado.
Una variable es continua cuando puede tomar cualquier valor dentro de un rango determinado. Por ejemplo, la altura de una persona puede ser medida en cualquier punto decimal entre 1 metro y 2 metros. Las variables continuas son siempre cuantitativas y se miden en una escala numérica.
Una variable cualitativa discreta es aquella que toma valores no numéricos o no continuos y que se pueden contar o enumerar, como por ejemplo el género, la nacionalidad o el estado civil. Estos valores no pueden ser fraccionarios o continuos, solo pueden ser valores enteros y distintos.
Los tipos cuantitativos son aquellos que pueden ser medidos y expresados en términos numéricos, como la edad, la altura, el peso, la temperatura, entre otros. Estos se dividen en dos categorías: variables continuas, que son aquellas que pueden tomar cualquier valor dentro de un rango específico, como la altura o el peso; y variables discretas, que son aquellas que sólo pueden tomar valores enteros, como el número de hijos o el número de veces que se visita un sitio web.