Un switch de red es un dispositivo de interconexión de red que se utiliza para conectar dispositivos en una red local (LAN). El switch es un dispositivo inteligente que actúa como un centro de comunicación y controla el flujo de datos entre los dispositivos conectados a él. Los switches tienen una gran variedad de aplicaciones, desde pequeñas redes domésticas hasta grandes redes empresariales.
Hay varias características importantes que definen un switch de red. Estas características incluyen el número de puertos, la velocidad de transmisión de datos, la capacidad de conmutación y la capacidad de gestión. Los switches modernos suelen tener cientos de puertos y una velocidad de transmisión de datos muy alta, lo que los hace ideales para redes de alta velocidad. La capacidad de conmutación se refiere a la cantidad de datos que el switch puede procesar en un momento dado, lo que es importante para garantizar que la red funcione de manera eficiente. La capacidad de gestión se refiere a la capacidad del switch para monitorizar y gestionar la red.
Los switches se pueden clasificar según su factor de forma. Los tipos más comunes son los switches de escritorio, los switches de montaje en rack y los switches modulares. Los switches de escritorio son pequeños y se utilizan en redes pequeñas. Los switches de montaje en rack son más grandes y se utilizan en redes de mayor tamaño. Los switches modulares son los más grandes y pueden ser configurados para adaptarse a cualquier tipo de red.
Una persona switcher es alguien que es capaz de cambiar entre diferentes estados mentales, emocionales o físicos. En el mundo de la informática, una persona switcher es alguien que es capaz de cambiar entre diferentes sistemas operativos o aplicaciones de manera fluida.
Hay varios tipos de características que se pueden encontrar en un switch. Estos incluyen la capacidad de gestión, la capacidad de conmutación, la velocidad de transmisión de datos, el número de puertos y la capacidad de alimentación por Ethernet (PoE).
Las ventajas de un switch de red incluyen una mayor velocidad de transmisión de datos, una mayor capacidad de gestión y una mayor capacidad de conmutación. Sin embargo, los switches también tienen algunas desventajas, como el costo y la complejidad. Los switches también pueden ser vulnerables a ataques informáticos, lo que puede poner en peligro la seguridad de la red.
Un router es un tipo de switch de red que se encarga de dirigir el tráfico de datos entre diferentes redes. Algunas de sus características son que posee múltiples puertos, tanto LAN como WAN, y puede implementar protocolos de enrutamiento para determinar la mejor ruta para enviar los datos. También puede incluir funciones de seguridad, como firewall y control de acceso. Además, un router puede ser configurado para priorizar ciertos tipos de tráfico, lo que es útil en redes con alta demanda de ancho de banda.
Existen varios tipos de switches que manejan la capa de enlace de red, entre ellos se encuentran:
1. Switches no administrados: Son los más sencillos de utilizar, se conectan directamente a la red y automáticamente comienzan a enviar datos a los dispositivos conectados.
2. Switches administrados: Permiten configurar opciones avanzadas como VLAN (redes virtuales), QoS (calidad de servicio) y seguridad.
3. Switches de capa 3: Además de manejar la capa de enlace, también pueden manejar la capa de red y realizar funciones de enrutamiento.
4. Switches PoE: Permiten suministrar energía eléctrica a los dispositivos conectados a través del mismo cable de red que se utiliza para transmitir datos.
Existen tres formas de acceso para administrar a los switches: acceso directo, acceso a través de la red y acceso mediante una consola serie.