En Japón, ser un host es una profesión muy valorada y en auge, especialmente en la ciudad de Tokio. Los hosts son hombres jóvenes que trabajan en clubes nocturnos y bares, donde su trabajo es entretener a los clientes, principalmente mujeres, con conversaciones interesantes, bebidas y juegos divertidos. Aunque esta profesión puede parecer similar a la de un barman o un camarero, los hosts tienen una función más específica: hacer que los clientes se sientan especiales, mimados y que pasen un buen rato.
En el mundo de los hosts, el término H2H (de human to human) es muy importante. Esto se refiere a la habilidad de los hosts de conectarse emocionalmente con los clientes, creando una relación personal y haciendo que se sientan cómodos y acogidos. Esta habilidad es muy valorada en la cultura japonesa, donde las relaciones interpersonales son muy importantes.
El trabajo de un host no se limita a conversaciones y bebidas. Los hosts también son expertos en la banca transaccional, lo que significa que son capaces de manejar grandes cantidades de dinero en efectivo de manera segura y eficiente. Esto se debe a que muchos clientes pagan por adelantado por los servicios de los hosts, lo que significa que los hosts deben ser responsables y confiables.
En algunos casos, los hosts pueden también ser ejecutivos transaccionales, lo que significa que pueden ser responsables de la gestión financiera de un club nocturno o bar. En estas situaciones, los hosts deben tener habilidades avanzadas en contabilidad, finanzas y gestión de negocios.
Las hostesses, por otro lado, son mujeres jóvenes que trabajan en los mismos clubes nocturnos y bares que los hosts. Su función principal es hacer que los clientes se sientan cómodos y bienvenidos, especialmente si son mujeres. Las hostesses deben ser amables, extrovertidas y tener habilidades sociales avanzadas. A menudo, las hostesses son responsables de llevar bebidas a los clientes y de interactuar con ellos de manera agradable y divertida.
En resumen, ser un host o una hostess en Japón es una profesión muy valorada y en auge, que requiere habilidades sociales avanzadas, responsabilidad y confiabilidad. Los hosts y hostesses son expertos en el arte de la conexión humana y son capaces de hacer que los clientes se sientan especiales y bienvenidos. Si bien esta profesión puede parecer única en el mundo, es un ejemplo de cómo las habilidades interpersonales pueden ser valoradas en cualquier lugar del mundo.
El artículo se enfoca en la profesión de «host» o anfitrión en Japón, por lo que no se menciona el sueldo de una hostess. Sin embargo, en general, el sueldo de una hostess puede variar dependiendo del lugar donde trabaje y la cantidad de clientes que tenga, pero suele ser un trabajo bien remunerado.
La persona que te lleva a tu mesa en un restaurante se llama «anfitrión» o «anfitriona». En Japón, esta figura es especialmente importante y valorada, y se conoce como «okami» en el caso de las mujeres y «okami-san» en el caso de los hombres.
La forma correcta de escribir hostess de restaurante en español es «anfitriona de restaurante».