La palabra «volcán» es una palabra grave, es decir, su acento recae en la penúltima sílaba. De esta manera, al dividirla, se debe separar la última sílaba de la penúltima. Por lo tanto, «volcán» se divide en dos sílabas: «vol» y «cán».
Ahora bien, es importante destacar que existen palabras agudas, graves y esdrújulas. Las palabras agudas son aquellas en las que el acento recae en la última sílaba, mientras que las graves lo hacen en la penúltima y las esdrújulas en la antepenúltima.
Por otro lado, la palabra «cómo» es una palabra interrogativa y exclamativa, y en este caso, se trata de una palabra aguda que sí lleva tilde. La tilde en «cómo» se coloca para indicar que la sílaba tónica es la última, y no confundirla con la palabra «como».
Respecto a la palabra «arcángel», es una palabra esdrújula, lo que significa que su acento recae en la antepenúltima sílaba. Por lo tanto, su división es: «ar», «cán» y «gel». En este caso, la tilde en «arcángel» se coloca para indicar la sílaba tónica.
En conclusión, la división de palabras es una regla fundamental en la lengua española, y aunque puede generar dudas en algunas palabras, es importante conocer las reglas para escribir correctamente. Es necesario tener en cuenta si la palabra es aguda, grave o esdrújula, y en función de ello, separar las sílabas y colocar la tilde correspondiente.
Las palabras sobresdrújulas son aquellas en las que la sílaba tónica se encuentra cuatro sílabas antes del final de la palabra. Ejemplos de palabras sobresdrújulas en español son «péinate», «espontáneamente» y «rápidamente».
La palabra «arcángel» se separa en sílabas de la siguiente manera: ar-cán-gel.
Los dos principales fenómenos que estudia la óptica geométrica son la reflexión y la refracción de la luz.