Este es sin ninguna el ordenador más potente del mundo. Este diseño japonés, proveniente del Centro de Ciencia Computacional de Japón en Kobe, sigue encabezando esta lista desde el pasado 2020, momento en el que batió al americano Summit con sus 415 petaflops.
La tecnología avanza a pasos agigantados y cada vez se busca contar con equipos más potentes que permitan realizar múltiples tareas de manera rápida y eficiente. En este sentido, la computadora más potente del mundo es la Fugaku, la cual es capaz de realizar más de 442 cuatrillones de operaciones por segundo. Esta supercomputadora fue desarrollada por Fujitsu y el RIKEN Center for Computational Science en Japón y es utilizada para fines científicos y de investigación.
Sin embargo, no todas las computadoras necesitan contar con una potencia tan elevada. Para aquellos que trabajan en tareas de diseño gráfico, edición de videos o programación, las estaciones de trabajo son una excelente opción. Estas computadoras se caracterizan por contar con una gran capacidad de procesamiento, memoria RAM y tarjeta gráfica, lo que las hace ideales para trabajar con programas de alta exigencia.
El microprocesador es uno de los componentes más importantes de cualquier computadora. Se trata de un chip que se encarga de procesar y ejecutar las instrucciones del sistema operativo y de los programas que se utilizan en el equipo. Un ejemplo de microprocesador es el Intel Core i9, el cual se caracteriza por contar con múltiples núcleos y una frecuencia de reloj elevada, lo que lo hace ideal para tareas de edición de videos, diseño gráfico y programación.
El microprocesador de un ordenador es el cerebro del equipo y su capacidad de procesamiento influye directamente en el rendimiento y velocidad del mismo. Por esta razón, es importante elegir un microprocesador que se adapte a las necesidades del usuario y a las tareas que se van a realizar en el equipo.
Algunas de las características que se deben tener en cuenta al momento de elegir un microprocesador son la cantidad de núcleos, la frecuencia de reloj, la memoria caché y la tecnología de fabricación. A mayor cantidad de núcleos y frecuencia de reloj, mayor será la capacidad de procesamiento del equipo.
Por último, cabe mencionar que la minicomputadora fue creada en la década de 1960 para ser utilizada en empresas y organizaciones gubernamentales. Estos equipos se caracterizaban por ser más pequeños y económicos que las computadoras de gran tamaño utilizadas en esa época y fueron el inicio de la evolución hacia los equipos de escritorio y portátiles que conocemos en la actualidad.
Las minicomputadoras surgieron en la década de 1960.
Las computadoras de la segunda generación fueron aquellas que se desarrollaron entre los años 1959 y 1964, y se caracterizaron por el uso de transistores en lugar de tubos de vacío, lo que las hacía más pequeñas, más rápidas y más confiables que sus predecesoras. Algunos ejemplos de estas computadoras son la IBM 7090, la DEC PDP-1, la UNIVAC 1108 y la CDC 1604.
La cantidad de almacenamiento que tiene un mainframe puede variar dependiendo del modelo y la configuración, pero en general estos sistemas cuentan con grandes capacidades de almacenamiento que pueden llegar a varios petabytes.