HTTP es el acrónimo de Hypertext Transfer Protocol (Protocolo de Transferencia de Hipertexto), el cual es un protocolo de comunicación que se utiliza en la World Wide Web para la transferencia de información entre servidores y clientes. En otras palabras, es el lenguaje que utilizan los navegadores web para comunicarse con los servidores web donde está alojada la información que se desea visualizar.
La transferencia secundaria se realiza cuando la información que se busca no se encuentra en el servidor original, por lo que se envía una solicitud a otro servidor para obtenerla. La persona encargada del archivo central procede a la transferencia primaria cuando se necesita enviar información de un archivo a otro, ya sea dentro de la misma organización o a otra entidad.
La realización de las transferencias primarias tiene una gran importancia ya que permite mantener actualizada y organizada la información en los archivos de la organización, evitando la pérdida de documentos importantes y garantizando que la información esté disponible para quienes la necesiten.
Los valores primarios de los documentos son aquellos que tienen un valor legal, administrativo o histórico, es decir, son los documentos que se deben conservar indefinidamente debido a su importancia para la organización. Por otro lado, los valores documentales secundarios son aquellos que tienen un valor informativo, cultural o científico, es decir, son los documentos que se pueden conservar por un tiempo determinado antes de su eliminación.
En cuanto a ejemplos de HTTP, podemos mencionar el acceso a una página web, el envío de un correo electrónico o la descarga de un archivo desde un servidor. Es importante destacar que el protocolo HTTP ha evolucionado con el tiempo, y actualmente se utiliza la versión 2.0, la cual es más eficiente y segura que sus versiones anteriores.
Los tres valores primarios de HTTP son GET, POST y HEAD.
La nube se refiere a una red de servidores y sistemas de almacenamiento en línea que permiten a los usuarios almacenar y acceder a datos y aplicaciones a través de Internet en lugar de tener que almacenarlos en su propio dispositivo. Algunos ejemplos populares de servicios en la nube incluyen Google Drive, Dropbox, iCloud y Microsoft OneDrive.
Los tres tipos de almacenamiento en la nube son: almacenamiento en la nube público, almacenamiento en la nube privado y almacenamiento en la nube híbrido. El almacenamiento en la nube público se proporciona a través de un proveedor de servicios de nube y es accesible para cualquier persona con acceso a Internet. El almacenamiento en la nube privado es utilizado por empresas y organizaciones para almacenar datos sensibles y se encuentra en su propio centro de datos privado. El almacenamiento en la nube híbrido combina ambos tipos de almacenamiento para crear una solución personalizada que se adapte a las necesidades de cada organización.