Un lenguaje de programación es un conjunto de reglas y símbolos que sirven para crear programas informáticos. La estructura de un lenguaje de programación se compone de diferentes elementos que permiten al programador comunicarse con la máquina y crear soluciones a problemas específicos.
Las características de la programación estructurada se basan en el uso de técnicas que permiten simplificar y organizar el código fuente en bloques, subrutinas o funciones. Esto se logra mediante el uso de estructuras de control como instrucciones de repetición, condicionales y selección.
Las estructuras de datos en programación, por otro lado, son elementos que permiten almacenar y manipular información en memoria. Estas estructuras incluyen arreglos, listas, pilas, colas y árboles, entre otros. Las estructuras de datos permiten optimizar la ejecución de programas y mejorar la eficiencia en el uso de recursos.
Las características de un lenguaje de programación incluyen su sintaxis, semántica y la forma en que se ejecuta el código. La sintaxis se refiere a la forma en que se escriben las instrucciones y la semántica se refiere al significado de las mismas. La ejecución del código se realiza mediante un intérprete o un compilador, dependiendo del lenguaje.
Las 4 estructuras de programación son: secuencial, selectiva, iterativa y modular. La estructura secuencial se refiere a la ejecución de instrucciones en orden, la selectiva se refiere a la ejecución de instrucciones según una condición, la iterativa se refiere a la ejecución de instrucciones varias veces y la modular se refiere a la organización del código en módulos o subrutinas.
Las 3 estructuras de programación más comunes son: secuencial, condicional e iterativa. La estructura secuencial se refiere a la ejecución de instrucciones en orden, la condicional se refiere a la ejecución de instrucciones según una condición y la iterativa se refiere a la ejecución de instrucciones varias veces.
En resumen, la estructura de un lenguaje de programación se compone de diferentes elementos que permiten al programador crear programas informáticos. Las características de la programación estructurada incluyen el uso de técnicas que permiten simplificar y organizar el código fuente en bloques, subrutinas o funciones. Las estructuras de datos permiten almacenar y manipular información en memoria. Un lenguaje de programación se caracteriza por su sintaxis, semántica y forma de ejecución. Las estructuras de programación más comunes son la secuencial, condicional e iterativa.
Los tres tipos de estructuras de control son: secuenciales, selectivas y repetitivas. Las estructuras secuenciales son aquellas que se ejecutan en orden, una tras otra. Las estructuras selectivas permiten tomar decisiones en función de una condición, y ejecutar diferentes bloques de código dependiendo del resultado de esa condición. Por último, las estructuras repetitivas permiten ejecutar un bloque de código varias veces, ya sea un número determinado de veces o mientras se cumpla una condición.
La programación orientada a objetos se caracteriza por el uso de objetos, que son instancias de clases que encapsulan datos y comportamientos relacionados. También se destaca por la herencia, que permite la creación de nuevas clases a partir de clases existentes, y el polimorfismo, que permite que objetos de diferentes clases respondan de manera similar a ciertas operaciones. Otras características importantes incluyen el encapsulamiento, que protege los datos internos de un objeto, y la abstracción, que permite modelar objetos complejos como entidades más simples y manejables.
Los fundamentos de la programación estructurada son la secuencialidad, la selección y la iteración. Estos fundamentos se basan en la idea de que un programa puede ser dividido en bloques de código más pequeños y manejables, lo que hace que el programa sea más fácil de entender, depurar y mantener. La secuencialidad se refiere al orden en que se ejecutan las instrucciones. La selección se refiere a la capacidad de tomar decisiones en el programa, mientras que la iteración se refiere a la capacidad de repetir un bloque de código varias veces.