- Haz clic en el botón de Inicio, selecciona el Panel de Control y abre Sistema y mantenimiento.
- A continuación, elige la opción Copia de seguridad y restauración.
- A la izquierda verás la opción Crear un disco de reparación del sistema.
Si tienes un problema en tu computadora y necesitas reparar Windows 7 sin formatear la PC, una buena opción es crear un disco de recuperación en una USB. De esta manera, podrás solucionar los problemas de arranque, restaurar el sistema a un punto anterior y realizar otras operaciones de reparación.
Lo primero que debes hacer es insertar una USB en tu computadora y asegurarte de que esté vacía, ya que todo lo que contenga será eliminado. Luego, sigue estos pasos:
1. Haz clic en Inicio y escribe «recuperación» en el cuadro de búsqueda.
2. Selecciona «Crear un disco de reparación del sistema» en los resultados de búsqueda.
3. Selecciona la USB que quieres utilizar y haz clic en «Crear disco».
4. Espera a que el proceso de creación del disco finalice.
Una vez que hayas creado el disco de recuperación en la USB, podrás utilizarlo para reparar Windows 7 en caso de que se presente algún problema. Simplemente debes reiniciar la computadora y asegurarte de que la USB esté conectada.
Si tienes el disco de instalación de Windows 7, también puedes utilizarlo para reparar el sistema. Esto es lo que debes hacer:
1. Inserta el disco de instalación en la unidad de CD/DVD de tu computadora.
2. Reinicia la computadora y asegúrate de que se inicie desde el disco de instalación.
3. Selecciona la opción «Reparar el equipo» en la pantalla de instalación.
4. Sigue las instrucciones en pantalla para reparar el sistema.
Si no tienes el disco de instalación de Windows 7, puedes crear un USB de arranque de reparación utilizando una herramienta como Rufus. Sigue estos pasos:
1. Descarga Rufus desde su sitio web oficial.
2. Conecta la USB que quieres utilizar y abre Rufus.
3. Selecciona la USB en el menú desplegable «Dispositivo».
4. Selecciona la opción «Crear un disco de arranque» y elige la imagen ISO de Windows 7.
5. Haz clic en «Iniciar» y espera a que el proceso de creación del USB finalice.
¿Qué hacer cuando Windows no puede reparar el equipo automáticamente?
Si Windows no puede reparar el equipo automáticamente, puedes intentar solucionar el problema utilizando el modo seguro, restaurando el sistema a un punto anterior o utilizando el disco de instalación o el USB de arranque de reparación. Si ninguna de estas opciones funciona, es posible que debas considerar la reinstalación de Windows.
Una manera de arreglar el ordenador sin tener que formatear es creando un disco de recuperación de Windows 7 en un USB. Este disco puede ayudar a reparar problemas de arranque y otros errores sin tener que borrar los archivos del sistema operativo.
Para reparar los archivos de Windows 7, puedes crear un disco de recuperación de Windows 7 en un USB siguiendo los pasos descritos en el artículo «Creando un Disco de Recuperación de Windows 7 en USB». Una vez que tengas el disco de recuperación, puedes arrancar tu computadora desde el USB y seguir las instrucciones en pantalla para reparar los archivos de Windows 7.
Para hacer una unidad de recuperación de Windows 7 en USB, siga estos pasos:
1. Conecte una unidad USB vacía con al menos 4 GB de espacio disponible en su computadora.
2. Abra el menú Inicio y busque «Crear un disco de recuperación».
3. Seleccione «Crear un disco de recuperación» en los resultados de búsqueda.
4. En la ventana de «Crear un disco de recuperación», asegúrese de que la opción «Copiar la partición de recuperación del equipo al disco de recuperación» esté seleccionada y haga clic en «Siguiente».
5. Seleccione la unidad USB conectada y haga clic en «Siguiente».
6. Haga clic en «Crear» y espere a que se complete el proceso.
7. Una vez finalizado, guarde la unidad de recuperación en un lugar seguro y etiquétela claramente para futuras referencias.