- Desconecta periféricos y revisa el hardware.
- Reconéctalo todo.
- Desactiva el overclocking.
- Chequea los virus.
- Desinstala software.
- Busca actualizaciones.
- Usa el solucionador de problemas.
- Desinstala un driver.
La pantalla azul de la muerte (BSOD) es uno de los errores más temidos por los usuarios de Windows 7. Esta pantalla suele aparecer cuando el sistema operativo se encuentra con un problema crítico que no puede resolver por sí mismo. Por lo general, esto se debe a un error de hardware o software. En esta guía, explicaremos cómo solucionar el problema de la pantalla azul en Windows 7.
La pantalla azul puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo incompatibilidades de hardware, controladores obsoletos, problemas de registro, virus y malware, y problemas de hardware como fallas en la memoria RAM o en el disco duro. Para solucionar la pantalla azul, primero debemos identificar la causa subyacente.
Una de las formas más efectivas de solucionar la pantalla azul es utilizar la herramienta de reparación de Windows 7. Esta herramienta se puede ejecutar desde el menú de opciones avanzadas de inicio de Windows 7. Para acceder a este menú, reinicia el equipo y presiona F8 antes de que aparezca el logotipo de Windows. Selecciona la opción «Reparar tu computadora» y luego selecciona «Reparación de inicio». Esta herramienta escaneará tu sistema en busca de problemas y, si se encuentra algún problema, intentará solucionarlo automáticamente.
Si la herramienta de reparación de Windows 7 no soluciona el problema, puedes intentar reparar manualmente el sistema operativo. Normalmente, esto se hace utilizando un CD o un USB de instalación de Windows 7. Pero si no tienes acceso a estos medios, también puedes utilizar una partición de recuperación (si tu computadora tiene una). Para acceder a la partición de recuperación, reinicia el equipo y presiona la tecla que se muestra en la pantalla durante el arranque.
Si estás experimentando una pantalla azul en un dispositivo Android, la causa más común es un problema con el software del dispositivo. En general, se puede solucionar el problema restaurando el dispositivo a su estado original de fábrica. Para hacer esto, accede a la configuración del dispositivo, selecciona «Copia de seguridad y restauración», y luego selecciona «Restablecer datos de fábrica». Ten en cuenta que esto borrará todos los datos del dispositivo, así que asegúrate de hacer una copia de seguridad de tus archivos importantes antes de continuar.
Si tu PC no inicia Windows, es posible que tengas un problema con el arranque del sistema. Una forma de solucionar esto es utilizando la herramienta de reparación de inicio de Windows 7, que se mencionó anteriormente. Si esto no funciona, también puedes intentar restaurar el sistema a un punto de restauración anterior utilizando la herramienta de restauración del sistema de Windows. Si esto tampoco funciona, tendrás que buscar ayuda de un técnico de computadoras para identificar y solucionar el problema.
En resumen, la pantalla azul en Windows 7 puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo problemas de hardware y software. Para solucionar el problema, primero debemos identificar la causa subyacente. Utiliza la herramienta de reparación de Windows 7 o intenta reparar manualmente el sistema operativo utilizando un CD o USB de instalación de Windows 7. Si estás experimentando una pantalla azul en un dispositivo Android, restaura el dispositivo a su estado original de fábrica. Si tu PC no inicia Windows, utiliza la herramienta de reparación de inicio de Windows 7 o restaura el sistema a un punto de restauración anterior.
Cuando Windows no puede reparar el equipo automáticamente, una opción es intentar reiniciar el equipo en modo seguro y realizar una restauración del sistema a un punto anterior en el tiempo. También se puede intentar realizar una reparación de inicio utilizando el disco de instalación de Windows 7. Si estos métodos no funcionan, puede ser necesario realizar una instalación limpia de Windows 7.
La pantalla táctil del celular puede fallar por varias razones, como un problema con los controladores de pantalla, daño físico en la pantalla, problemas de software o errores en el sistema operativo del teléfono. También puede ser causado por la falta de calibración o la necesidad de una actualización del sistema.