Los circuitos virtuales son una técnica utilizada para establecer una conexión de red entre dos dispositivos, permitiendo la transferencia de datos de forma eficiente y segura. En este tipo de conexión, se crea un canal de comunicación temporal que se utiliza exclusivamente para el intercambio de información entre los dos extremos de la conexión.
Al utilizar la técnica de circuitos virtuales, se garantiza una mayor calidad de servicio en la transmisión de datos, ya que se establece una ruta dedicada y exclusiva para la conexión. Esto se traduce en una menor latencia, una mayor velocidad de transmisión y una mayor fiabilidad en la entrega de los datos.
El MTU máximo, o tamaño máximo de unidad de transmisión, es el tamaño máximo de los paquetes que se pueden enviar a través de la red. Este valor varía según el tipo de conexión y la tecnología utilizada, pero en general, se sitúa alrededor de los 1500 bytes.
El tamaño mínimo de la cabecera de un datagrama IP es de 20 bytes, y se utiliza para incluir información de control y configuración de la conexión. Este tamaño puede variar según la tecnología utilizada y la información que se incluya en la cabecera.
El tamaño de MTU es un factor crítico en la transmisión de datos, ya que si el tamaño de los paquetes es mayor que el MTU de la red, los paquetes se fragmentarán y se enviarán en múltiples partes. Esto puede afectar la velocidad y la fiabilidad de la conexión, por lo que es importante seleccionar un tamaño de MTU adecuado para la transmisión de datos.
El TCP, o Protocolo de Control de Transmisión, es un protocolo utilizado en la transmisión de datos para garantizar la fiabilidad y la integridad de los datos. Este protocolo utiliza técnicas de control de flujo y retransmisión de paquetes para asegurar que los datos se entreguen correctamente y sin errores.
En resumen, el circuito virtual es una técnica importante en la transmisión de datos, ya que garantiza una conexión dedicada y exclusiva entre dos dispositivos. Para asegurar una transmisión eficiente y segura de datos, es importante considerar el tamaño de MTU y la utilización de protocolos como el TCP para garantizar la fiabilidad y la integridad de la conexión.
TCP e IP son dos protocolos diferentes que se utilizan en la transmisión de datos a través de una red. IP es responsable de la entrega de los paquetes de datos de un punto a otro, mientras que TCP se encarga de dividir los datos en paquetes, enviarlos y asegurarse de que se hayan recibido correctamente. En resumen, IP es responsable de la entrega de los datos y TCP es responsable de la transmisión de los mismos.
Una ventaja de UDP sobre TCP es que UDP es más rápido y eficiente en la transmisión de datos, ya que no tiene que establecer una conexión antes de enviar los paquetes de datos. Además, UDP es adecuado para aplicaciones en tiempo real que requieren una transmisión rápida de datos, como la transmisión de video o audio en vivo.
Los protocolos de la capa de aplicación TCP/IP incluyen HTTP, FTP, SMTP, DNS, Telnet, SSH, entre otros.