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Windows 7 es una versión popular del sistema operativo que ha estado en uso durante más de una década. Sin embargo, a partir del 14 de enero de 2020, Microsoft dejó de proporcionar actualizaciones de seguridad para Windows 7, lo que significa que los usuarios que aún lo utilizan son más vulnerables a los ataques cibernéticos. Por lo tanto, es importante actualizar a una versión más reciente del sistema operativo, como Windows 10. En este artículo, explicaremos cómo actualizar Windows 7 a Windows 10 gratis en 2021.
Primero, es importante verificar si su computadora cumple con los requisitos mínimos del sistema para ejecutar Windows 10. Estos incluyen un procesador de 1 GHz o más rápido, 1 GB de RAM para la versión de 32 bits o 2 GB de RAM para la versión de 64 bits, 16 GB de espacio libre en el disco duro para la versión de 32 bits o 20 GB para la versión de 64 bits, una tarjeta gráfica compatible con DirectX 9 o posterior, y una pantalla con una resolución de al menos 800 x 600 píxeles.
Una vez que haya verificado que su computadora cumple con los requisitos del sistema, puede descargar la herramienta de actualización de Windows 10 desde el sitio web de Microsoft. Después de descargar la herramienta, ejecute el archivo y siga las instrucciones en pantalla para actualizar su sistema operativo. Es importante señalar que este proceso puede llevar varias horas, dependiendo de la velocidad de su computadora y la cantidad de datos que necesiten ser transferidos.
Si tiene Windows 10 y desea instalar Windows 8.1, puede hacerlo utilizando la herramienta de recuperación de Windows. Para hacer esto, vaya a la configuración de su PC, seleccione «Actualización y seguridad», luego «Recuperación» y haga clic en «Comenzar» debajo de «Restablecer esta PC». A continuación, seleccione la opción «Eliminar todo» y siga las instrucciones en pantalla para instalar Windows 8.1.
Si desea cambiar de Windows 10 a Windows 8 sin formatear su disco duro, puede hacerlo utilizando la herramienta de partición de disco. Para hacer esto, haga clic con el botón derecho del mouse en el botón de inicio de Windows y seleccione «Administración de discos». A continuación, haga clic con el botón derecho del mouse en la partición de su disco duro que contiene Windows 10 y seleccione «Eliminar volumen». Luego, cree una nueva partición en el espacio libre y seleccione la opción para instalar Windows 8 en esa partición.
En cuanto a la pregunta sobre cuál es más rápido, Windows 8 o Windows 8.1, la respuesta es que Windows 8.1 generalmente se considera más rápido y eficiente que Windows 8. Esto se debe en parte a las mejoras en el rendimiento de la memoria y la administración de energía que se introdujeron en Windows 8.1.
Por último, para aquellos que buscan la versión más liviana de Windows 8.1, la respuesta es la edición «Windows 8.1 con Bing». Esta versión viene preinstalada en dispositivos de bajo costo y tiene un enfoque en la integración con servicios en línea de Microsoft, como Bing y OneDrive. Aunque puede tener algunas limitaciones en términos de personalización y configuración, es una opción sólida para aquellos que buscan un sistema operativo liviano y eficiente.
La principal diferencia entre Windows 8.1 Single Language y Pro es que la versión Single Language solo permite cambiar el idioma del sistema operativo a un idioma diferente al predeterminado, mientras que la versión Pro tiene características adicionales como la capacidad de conectarse a un dominio de red, cifrado de disco BitLocker y Hyper-V para virtualización. Además, la versión Pro también incluye funciones de seguridad adicionales y una mayor flexibilidad para personalizar el sistema operativo.
Lamentablemente, no es posible cambiar de 32 bits a 64 bits sin formatear el disco duro. Para cambiar de 32 bits a 64 bits, es necesario realizar una instalación limpia de Windows 64 bits en el equipo. Esto implica formatear el disco duro y perder todos los datos almacenados en él. Es importante hacer una copia de seguridad de los datos importantes antes de realizar la instalación de Windows.
Si instalas un sistema operativo de 32 bits en un procesador de 64 bits, el sistema operativo funcionará normalmente, pero no podrás aprovechar todas las capacidades del procesador. Los procesadores de 64 bits pueden acceder a más memoria RAM y procesar datos más rápidamente que los procesadores de 32 bits, por lo que si quieres aprovechar al máximo el potencial de tu procesador de 64 bits, es recomendable instalar un sistema operativo de 64 bits.