La informática y la tecnología han evolucionado de manera significativa en las últimas décadas, y con ello, han surgido numerosas herramientas y programas para facilitar el manejo de diferentes sistemas operativos y programas. Dos de los términos más utilizados y que resultan fundamentales en este ámbito son CLI y GUI.
CLI, cuyas siglas significan Command Line Interface, es una interfaz de línea de comandos que permite interactuar con un sistema operativo a través de comandos escritos en una consola. Este tipo de interfaz, que tuvo mayor popularidad en los años 80 y 90, todavía es utilizado en algunos sistemas operativos, como MS-DOS Windows y OS 2.
Por otro lado, GUI es la sigla de Graphical User Interface, que en español se traduce como Interfaz Gráfica de Usuario. A diferencia de la CLI, la GUI permite interactuar con un sistema operativo o un programa a través de elementos gráficos, como iconos, botones y ventanas. La mayoría de los sistemas operativos actuales, como Windows, MacOS y Ubuntu, utilizan una interfaz gráfica para facilitar el manejo de los programas y el sistema.
En el caso de Ubuntu, una distribución de Linux, la GUI es conocida como Unity y proporciona una interfaz visualmente atractiva y fácil de usar. Sin embargo, Ubuntu también cuenta con una terminal de línea de comandos que permite acceder a diferentes funciones del sistema operativo.
En el ámbito de las redes de computadoras, la CLI también es utilizada para acceder a la consola de un switch, que es un dispositivo de red utilizado para interconectar diferentes dispositivos y permitir la comunicación entre ellos. Para acceder a la consola de un switch, es necesario conectar un cable serial al puerto correspondiente del dispositivo y utilizar un programa de emulación de terminal, como PuTTY.
En resumen, CLI y GUI son términos fundamentales en el ámbito de la informática y la tecnología, ya que hacen referencia a las interfaces utilizadas para interactuar con diferentes sistemas operativos y programas. Mientras que la CLI se basa en comandos escritos en una consola, la GUI utiliza elementos gráficos para facilitar el manejo de los programas y el sistema. Tanto en sistemas operativos como en dispositivos de red, es posible utilizar ambas interfaces para acceder a diferentes funciones y configuraciones.
Para acceder a MS-DOS en Windows, debes abrir la aplicación «Símbolo del sistema» o «Command Prompt» desde el menú de inicio o presionando la combinación de teclas «Windows + R» y luego escribir «cmd» en la ventana que aparece. Esto abrirá la interfaz de línea de comandos de MS-DOS en Windows.
La GUI en Linux trabaja como una capa de software que se ejecuta sobre el sistema operativo para proporcionar una interfaz gráfica de usuario. Esta interfaz permite a los usuarios interactuar con el sistema operativo de una manera más intuitiva y visual a través de ventanas, iconos, menús y otros elementos gráficos. La GUI en Linux también utiliza controladores de dispositivos para comunicarse con el hardware subyacente y mostrar la información en la pantalla. En resumen, la GUI en Linux es una herramienta esencial para hacer que la interacción con el sistema operativo sea más fácil y accesible para los usuarios.
Para instalar una interfaz gráfica en Ubuntu, puedes abrir la terminal y ejecutar el siguiente comando:
sudo apt-get install ubuntu-desktop
Luego, sigue las instrucciones que aparecen en pantalla para completar la instalación. Una vez finalizado el proceso, puedes reiniciar el sistema y la interfaz gráfica estará disponible para usar. También hay otras interfaces gráficas que puedes instalar, como KDE, GNOME, entre otras.