La cita textual y contextual es una herramienta fundamental en la investigación y escritura de textos académicos. Se trata de transcribir una frase o párrafo exactamente tal como aparece en la fuente original, indicando entre comillas el texto copiado y su autor. Pero además de la cita textual, es importante considerar su contexto, es decir, las circunstancias en las que se produce y su relación con el resto del texto.
Para hacer una buena cita textual y contextual, es necesario tener un vocabulario base, es decir, un conjunto de palabras que se consideran básicas o esenciales en un área de conocimiento determinada. Este vocabulario puede variar según la disciplina, por lo que es importante conocerlo y manejarlo adecuadamente para poder citar y entender textos de manera precisa.
En el caso de la narrativa, los elementos contextuales de un cuento incluyen el ambiente o entorno en el que se desarrolla la historia, los personajes que intervienen, sus acciones y motivaciones, así como el punto de vista desde el que se narra y el tiempo en que se sitúa la trama. Todos estos elementos son importantes para comprender el significado del cuento y para citarlo adecuadamente.
Además, los aspectos contextuales de la narrativa incluyen el contexto histórico, social, cultural y político en el que fue escrita, así como las influencias literarias y artísticas que se reflejan en la obra. Estos elementos permiten entender mejor la intención del autor y la relevancia de la obra en su época y en la actualidad.
Contextualizar implica situar un texto o evento en su contexto adecuado, es decir, en las circunstancias que lo rodean y que influyen en su significado. Esto implica tener en cuenta aspectos como la época, el lugar, las condiciones sociales y culturales, las influencias políticas y artísticas, entre otros. Al contextualizar un texto, se puede comprender mejor su significado y su relevancia en su contexto histórico y cultural.
Finalmente, es importante mencionar que cada persona tiene su propio contexto de vida, que incluye sus experiencias, creencias, valores, educación, cultura, entre otros aspectos. Este contexto influye en la manera en que se interpreta y se utiliza la información, por lo que es importante tenerlo en cuenta al hacer una cita textual y contextual, así como al leer y escribir textos en general.
En el contexto de una investigación se incluyen detalles relevantes como el marco teórico, antecedentes, objetivos, hipótesis, metodología y resultados previos relacionados con el tema de estudio. También se pueden incluir aspectos socioeconómicos, culturales, históricos y políticos que puedan tener influencia en los resultados de la investigación. En resumen, el contexto proporciona la información necesaria para entender y evaluar los resultados de la investigación.
Para definir el contexto de un proyecto se deben considerar todos los factores y circunstancias que puedan influir en su desarrollo y resultado final. Esto incluye aspectos como el entorno social, económico, político, tecnológico y cultural en el que se llevará a cabo el proyecto, así como las necesidades y expectativas de los usuarios y las partes interesadas. Es importante analizar detalladamente el contexto para identificar los posibles riesgos y oportunidades que puedan surgir y poder tomar decisiones informadas para alcanzar los objetivos del proyecto.
Existen diversos tipos de contextos sociales, entre ellos podemos mencionar el contexto cultural, el contexto económico, el contexto político, el contexto histórico y el contexto geográfico, entre otros. Cada uno de estos contextos influye en nuestra forma de comunicarnos y de interpretar los mensajes que recibimos.