El códec AAC es un rival directo de códecs de audio similares como el MP3. El procedimiento para comprimir los archivos de audio y luego utilizarlos sin pérdidas audibles también es similar al que utiliza el códec MP3.
Las siglas AAC significan Advanced Audio Coding y forman parte del estándar MPEG (al igual que el MP3). La compresión de las frecuencias de audio se consigue de forma similar al estándar MP3: AAC filtra las frecuencias que el oído humano no puede percibir. La pérdida resultante en cuanto a la dinámica de la canción no es perceptible para la mayoría de la gente. Sin embargo, al igual que ocurre con el MP3, siempre hay personas que valoran la máxima calidad y para las que, por tanto, el AAC no es una alternativa.
Comparación con el MP3
Un archivo AAC persigue objetivos similares a los del MP3, por lo que la comparación con este códec (y muchos otros) tiene sentido. En general, AAC utiliza algoritmos ligeramente más eficientes en la codificación y el códec tiene una corrección de errores más precisa. Así que, por término medio, un archivo AAC es ligeramente superior a un MP3 comparable. Por tanto, existen dos opciones:
- Un archivo AAC consigue una calidad de audio similar a la de un archivo MP3 con una tasa de bits ligeramente inferior. Esto permite ahorrar capacidad de almacenamiento en el respectivo soporte de datos, ya que un archivo puede tener un tamaño de 2,8 MB en lugar de 3,1 MB, por ejemplo, sin ninguna pérdida de calidad auditiva.
La segunda variante consiste en codificar el archivo AAC con la misma tasa de bits. Esto hace que el archivo de audio tenga más o menos el mismo tamaño que utilizando el códec MP3, pero ofrece una calidad mejorada.
Sin embargo, estas opciones están más en el ámbito teórico. La mayoría de los usuarios no podrán oír la diferencia entre AAC y MP3 a una velocidad de bits suficientemente alta (unos 128 kB/s). Esto depende, entre otras cosas, del equipo de audio que se utilice, que ciertamente no es de gama alta para el aficionado medio a la música.
Distribución del AAC
En la actualidad, el AAC no se acerca a la popularidad del MP3. Sin embargo, es compatible con muchas tiendas en línea, como iTunes, y también es utilizado con frecuencia por las radios en línea. Además, prácticamente todos los reproductores de audio pueden reproducir un archivo AAC e incluso los teléfonos inteligentes no tienen problemas con él cuando lo entregan. Apple, en particular, está impulsando la difusión de AAC, ya que en la tienda iTunes, por ejemplo, se pueden comprar muchos títulos codificados como AAC a 256 kB/s. Este nivel de calidad corresponde al resultado de un archivo AAC. Con este nivel de calidad, el resultado corresponde a un CD de audio ordinario.