Ya sea en la oficina o para fines privados, sin una conexión de banda ancha, el acceso sin interrupciones a Internet es difícilmente concebible hoy en día. Un sinfín de aplicaciones ofimáticas exigen altas velocidades de datos tanto como las películas y la música.
Desde hace unos 20 años, tanto los usuarios comerciales como los hogares de la República Federal de Alemania tienen la posibilidad de acceder a Internet rápido mediante una conexión de banda ancha. Las velocidades de transmisión de datos a partir de 16 Mbit/s permiten no sólo abrir páginas web sencillas a la velocidad del rayo, sino también reproducir vídeos de alta resolución sin interferencias y llamar rápidamente a gráficos que requieren mucha memoria. Dependiendo de la tecnología de banda ancha disponible y del contrato elegido, tanto la descarga como la carga son posibles a altas velocidades de transmisión.
Requisito básico: cable de banda ancha
Para que se pueda proporcionar una conexión de banda ancha, debe haber un cable de banda ancha en la ubicación en cuestión. Hoy en día, este requisito se da en prácticamente todas las grandes ciudades. Incluso en regiones rurales y rincones remotos, así como en las islas del Mar del Norte y el Mar Báltico, el acceso a Internet de banda ancha hace tiempo que dejó de ser un problema. En este caso, a menudo se pueden alcanzar velocidades de datos de al menos 16 Mbit/s. Además, suele haber ofertas adicionales para uso empresarial y oficial. El llamado atlas de la banda ancha del Ministerio Federal de Transportes e Infraestructura Digital (BMVI) permite conocer fácilmente el estado actual de desarrollo y si existe la posibilidad de disponer de internet rápido en una localidad concreta.
Variante: banda ancha a través de LTE
Mientras que las clásicas conexiones de banda ancha se suministran bien a través de DSL/VDSL, fibra óptica o cable, también existe la posibilidad de utilizar tecnologías LTE. Como el acceso a Internet se establece a través de un enlace de radio, se pueden utilizar receptores móviles y llegar a lugares incómodos. Mediante los llamados routers híbridos, es posible establecer conexiones estacionarias a Internet a alta velocidad. En la actualidad, es posible alcanzar velocidades de datos de hasta 100 MBit/s.
Comprueba qué oferta tiene más sentido
Quien quiera pedir una nueva conexión de banda ancha debe comprobar de antemano qué oferta tiene más sentido para los fines deseados. Mientras que los hogares suelen contentarse con un contrato DSL convencional con una velocidad de transferencia de datos de 50 Mbit/s, para las empresas con varios ordenadores en la red o con un amplio intercambio de información, suelen tener sentido los contratos con una velocidad de al menos 250 Mbit/s. Sin embargo, siempre es importante para el uso sin problemas de una conexión de banda ancha contar con la tecnología adecuada más allá de la línea de suministro, es decir, en las instalaciones del usuario. Un router moderno, cables de datos CAT 7 y potentes repetidores son muy útiles aquí para mantener la velocidad de datos alta dentro de la casa también.