Para reducir la presencia de perfiles falsos, Instagram está pensando en un video selfie obligatorio, pero hay un largo camino por recorrer
Hay demasiados perfiles falsos, demasiado spam, demasiados bots y demasiadas cuentas inactivas en Instagram y hay que hacer algo. Esta parece ser la idea detrás de la última innovación introducida por la red social, que pertenece al grupo Meta: el video selfie obligatorio para verificar la identidad de los usuarios.
Dejemos las cosas claras: la verificación de identidad a través de un video selfie lleva bastante tiempo en Instagram, pero hasta ahora la plataforma se limitaba a pedirla sólo a los usuarios considerados "sospechosos", por ejemplo, los que tienen un comportamiento contrario a los términos del servicio, como la odiosa práctica del "follow/unfollow" para adquirir nuevos seguidores de forma poco natural. O cuando la cuenta "apestaba" a bots. Ahora, sin embargo, parece que la verificación está a punto de ser obligatoria para todos, o casi.
Verificación por vídeo en Instagram, lo que sabemos
Matt Navarra no dio muchos detalles sobre la nueva función, limitándose a mostrar dos capturas de pantalla del proceso de verificación y añadiendo que "Instagram está utilizando ahora selfies en vídeo para confirmar la identidad de los usuarios. Meta promete no almacenar datos biométricos".
La primera captura de pantalla dice: "Necesitamos un vídeo corto de usted moviendo la cabeza en varias direcciones. Nos ayudará a confirmar que eres una persona real y tu identidad. Este vídeo nunca será visible en Instagram y se eliminará en 30 días. Esto no utilizará el reconocimiento facial ni recopilará tus datos biométricos"
La segunda captura de pantalla, por otro lado, es la que aparece después de que hayas terminado de grabar el vídeo de verificación y, esencialmente, repite la misma información que la anterior.
Instagram, los menores y la privacidad
Todo esto, de momento, solo está ocurriendo en los nuevos perfiles registrados en Estados Unidos: a los usuarios existentes aún no se les ha pedido que se tomen un vídeo selfie de confirmación.
Y, siendo sinceros, también es difícil que esta innovación llegue a Europa, donde la atención a la privacidad y la protección de los menores (la edad mínima para registrarse en la red social es de apenas 13 años) no sólo son mucho más altas que en el resto del mundo, sino que están estrictamente reguladas.
Sinceramente, parece difícil, por ejemplo, que Instagram quiera asumir las pesadísimas consecuencias técnicas de la normativa europea GDPR para hacer esta función obligatoria en Europa.