Las motherboard o placas base son uno de los componentes más importantes de un ordenador, ya que conectan todos los componentes y permiten el funcionamiento del sistema. Existen varios tipos de placas base, y en este artículo se explicará cómo se clasifican y cuáles son sus características más importantes.
Las placas base se dividen en dos categorías principales: las de escritorio y las portátiles. Las placas base de escritorio se dividen a su vez en tres tipos: ATX, MicroATX y Mini-ITX. La placa ATX es la más grande de las tres, y está diseñada para soportar múltiples tarjetas de expansión y grandes sistemas de refrigeración. La placa MicroATX es más pequeña que la ATX, pero aún así puede soportar varias tarjetas de expansión. La placa Mini-ITX es la más pequeña de las tres, y está diseñada principalmente para sistemas de bajo consumo y pequeños factores de forma.
En cuanto a las placas base portátiles, hay dos tipos principales: las integradas y las desmontables. Las placas base integradas se encuentran en la mayoría de los ordenadores portátiles y son difíciles de reemplazar o actualizar. Las placas base desmontables, por otro lado, se encuentran en dispositivos 2 en 1 y tabletas, y pueden ser reemplazadas o actualizadas más fácilmente.
En cuanto a la memoria RAM y la memoria interna, ambas son importantes para el rendimiento del ordenador. La memoria RAM es la memoria temporal que utiliza el ordenador para realizar tareas y ejecutar programas, mientras que la memoria interna, como el disco duro o el SSD, es donde se almacena la información a largo plazo. Ambas son importantes, pero la cantidad de RAM es más crítica para el rendimiento general del sistema.
En cuanto a la elección entre ITX o ATX, depende del uso previsto del ordenador. Si se desea un sistema de alto rendimiento con varias tarjetas de expansión y dispositivos de almacenamiento, se recomienda una placa base ATX. Si se desea un sistema más pequeño y con un menor consumo de energía, una placa Mini-ITX podría ser más adecuada.
La placa MicroATX es una placa base intermedia entre la ATX y la Mini-ITX. Tiene un tamaño de aproximadamente 9.6 pulgadas por 9.6 pulgadas, lo que la hace más pequeña que la ATX pero más grande que la Mini-ITX. Es una buena opción para aquellos que buscan un equilibrio entre el rendimiento y el tamaño.
Por último, las dimensiones de una tarjeta madre ATX son de aproximadamente 12 pulgadas por 9.6 pulgadas. Es la más grande de las tres placas base de escritorio y está diseñada para soportar múltiples tarjetas de expansión y grandes sistemas de refrigeración.
En resumen, la elección de una placa base dependerá del uso previsto del ordenador y las características deseadas. La memoria RAM es más crítica para el rendimiento general del sistema que la memoria interna, y la elección entre ITX y ATX dependerá del tamaño y del rendimiento deseado. La placa MicroATX es una buena opción para aquellos que buscan un equilibrio entre el rendimiento y el tamaño, mientras que la placa ATX es la mejor opción para sistemas de alto rendimiento.
En el conector ATX se conecta la fuente de poder a la motherboard.
EPS 12V es un estándar de suministro de energía para computadoras que se utiliza en las fuentes de alimentación y en las placas base (motherboards) que admiten procesadores de alta potencia. Este estándar proporciona más energía y estabilidad para sistemas de alta gama y servidores.
Los conectores de 4 terminales son conectores de alimentación que se utilizan en las motherboards para proporcionar energía a la CPU. Estos conectores se llaman ATX12V y EPS12V, y son compatibles con diferentes tipos de procesadores.