Una imagen digital es una representación visual de datos en forma de pixeles que se almacenan y transmiten electrónicamente. Es una imagen que se crea y se guarda en formato digital, lo que significa que se puede ver en una pantalla de ordenador o dispositivo móvil, y se puede enviar y compartir fácilmente a través de Internet.
Las imágenes digitales se utilizan en muchos contextos diferentes, desde la fotografía y el arte digital hasta la publicidad y la medicina. También se utilizan en campos como la ciencia, la tecnología y la educación.
Una imagen digital se compone de miles o millones de píxeles, cada uno de los cuales tiene un valor de color y luminosidad. Estos píxeles se organizan en una cuadrícula para formar la imagen completa. La resolución de una imagen se mide en píxeles por pulgada (ppp) y afecta a la calidad y claridad de la imagen.
Existen diferentes tipos de imágenes digitales, entre ellos, podemos destacar los siguientes: JPEG (Joint Photographic Experts Group), GIF (Graphics Interchange Format), PNG (Portable Network Graphics), BMP (Bitmap), TIFF (Tagged Image File Format), RAW (Formato de archivo de imagen sin procesar).
Las imágenes digitales pueden tener diferentes características, como tamaño, resolución, profundidad de color, formato y calidad. La calidad de una imagen se determina por su resolución, que afecta a la claridad y detalle de la imagen, así como por su formato, que determina la cantidad de información que se puede almacenar en el archivo de imagen.
Una imagen debe tener una buena resolución y calidad, así como un formato adecuado para su uso previsto. También debe tener un tamaño adecuado para su uso en diferentes plataformas y dispositivos. La elección del formato de imagen adecuado también es importante para garantizar la compatibilidad con diferentes programas y plataformas. En resumen, una imagen debe ser clara, nítida y adecuada para su uso previsto.
La imagen digital se caracteriza por estar compuesta por píxeles, tener una resolución y tamaño determinados, y ser almacenada en formato digital. También puede ser modificada mediante programas de edición de imágenes.
Con una imagen digital se pueden realizar diversas acciones, como editarla, compartirla en redes sociales, imprimirla en diferentes tamaños y formatos, utilizarla como fondo de pantalla o como parte de un diseño gráfico, entre otras cosas. También se pueden almacenar en dispositivos electrónicos y acceder a ellas en cualquier momento y lugar.
Una imagen digital se almacena en un formato de archivo específico, como JPEG, PNG, BMP o GIF. El archivo contiene información sobre la ubicación y el color de cada píxel en la imagen, y esta información se guarda en una memoria de almacenamiento, como un disco duro, una tarjeta de memoria o una unidad flash USB.