Nuestra máxima tolerancia al calor depende de la humedad, pero el cambio climático amenaza nuestra salud al sufrir las altas temperaturas
El cambio climático está provocando un aumento de las temperaturas en todo el mundo, pero el calor extremo es una amenaza para la salud de los seres vivos. El cuerpo humano puede soportar el calor hasta cierto punto. Un estudio de 2020 publicado en la revista Science Advances indicó que la temperatura máxima que puede tolerar un ser humano es una temperatura de bulbo húmedo de 95 grados Fahrenheit, o 35 grados Celsius. Sin embargo, la temperatura de bulbo húmedo no se corresponde con la temperatura del aire indicada por los meteorólogos.
La temperatura de bulbo húmedo y el calor que podemos tomar
La temperatura de bulbo húmedo se mide con un termómetro cubierto con un paño empapado en agua y tiene en cuenta tanto el calor como la humedad. Cuanta más agua haya en el aire, más difícil será que el sudor se evapore del cuerpo y refresque a la persona. Según Colin Raymond, investigador postdoctoral del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, si la humedad es baja pero la temperatura es alta, o viceversa, la temperatura del bulbo húmedo probablemente no se acercará al punto crítico para el cuerpo humano. Sin embargo, cuando tanto la humedad como la temperatura son muy elevadas, la temperatura de bulbo húmedo puede alcanzar niveles peligrosos. Por ejemplo, cuando la temperatura del aire es de 46,1°C y la humedad relativa es del 30%, la temperatura de bulbo húmedo es sólo de unos 30,5°C. Pero cuando la temperatura del aire es de 38,9°C y la humedad relativa es del 77%, la temperatura de bulbo húmedo es de unos 35°C, que es el máximo que se puede soportar.
La razón por la que las personas no pueden sobrevivir a las altas temperaturas está relacionada con el hecho de que en esos casos ya no pueden regular su temperatura interna. "Si la gradación del bulbo húmedo supera la del cuerpo humano, puedes seguir sudando, pero no podrás enfriar tu cuerpo a la temperatura que necesita para funcionar fisiológicamente", dijo Raymond a WordsSideKick.com. En este punto, el cuerpo se vuelve hipertérmico y, según los Institutos Nacionales de Salud, se pueden experimentar síntomas como el aumento de la frecuencia cardíaca, la falta de sudoración, la pérdida de conciencia e incluso el coma.
Raymond, sin embargo, señaló que una temperatura de bulbo húmedo de 35°C no causará la muerte inmediata porque pasarán unas tres horas antes de que el calor sea insoportable. En realidad, se trata de temperaturas estimadas que dependen de una serie de factores, e incluso temperaturas más bajas pueden ser mortales. Por ejemplo, los ancianos o las personas con ciertas condiciones de salud, como la obesidad, que no pueden regular su temperatura, pueden no sobrevivir ni siquiera por debajo de los 35°C en el bulbo húmedo.
Algunas localidades ya han experimentado una o dos horas de calor extremo que pueden ser perjudiciales para la supervivencia, y se prevé que en los próximos 30-50 años, con el calentamiento global, zonas del noroeste de México, el norte de la India, el sureste de Asia y el oeste de África estarán en riesgo. El cambio climático amenaza a muchas especies de seres vivos y otro estudio ha estimado que sólo nos quedan 10 años para salvar los arrecifes de coral.
Stefania Bernardini