La Gestión de Identidades y Accesos (IAM) se refiere a la administración de las identidades de los usuarios y sus derechos de acceso a las redes, aplicaciones y otros sistemas digitales. Las tareas centrales aquí son la autenticación y la autorización del usuario.
La creciente avalancha diaria de datos obliga a las empresas y otras organizaciones a ocuparse intensamente de su administración y mantenimiento. Esto incluye, entre otras cosas, todas las cuentas de usuario y los recursos necesarios para ellas en una red. Al fin y al cabo, los datos personales deben almacenarse de forma permanente -también por razones de cumplimiento- para que estén disponibles de forma constante y fiable. Dependiendo del número de clientes y proveedores, no sólo se pueden acumular enormes cantidades de datos. También hay que gestionar diferentes derechos de acceso para distintos sistemas y varios departamentos.
¿Por qué es cada vez más importante la Gestión de Identidades y Accesos (IAM)?
Otras razones que refuerzan la importancia de una IAM inteligente son el creciente uso de dispositivos móviles, la descentralización de los sistemas de TI y el acceso global a la nube. Si una empresa no es capaz de identificar claramente a cada usuario y asignarle sus derechos, los problemas surgirán muy rápidamente, tanto más cuanto mayor sea la empresa. IAM simplifica y automatiza los procesos de recopilación, supervisión y gestión de las identidades y los derechos de acceso de los usuarios. Garantiza el cumplimiento de las políticas y la comprobación de todas las personas y servicios, de modo que se mantenga la conformidad.
Autenticación mediante la gestión de identidades y accesos (IAM)
Cuando se accede a un sistema o aplicación, el usuario debe poder demostrar que está autorizado para ello. En la mayoría de los casos, tiene que introducir su nombre de usuario o dirección de correo electrónico y una contraseña al iniciar la sesión. Otras posibilidades son las combinaciones de PIN o contraseña y una tarjeta de acceso, una huella dactilar o un smartphone. En este caso, también se habla de doble factor o autenticación fuerte.
Autorización a través de IAM
El segundo papel importante además de la autenticación única en la Gestión de Identidades y Accesos es la autorización de un usuario. Aquí se determina a qué recursos puede acceder en una red, es decir, a qué aplicaciones y datos o componentes de hardware como impresoras. Esto hace que la autorización sea mucho más compleja que la comprobación de la identidad. Porque cada empleado de una gran organización o empresa tiene diferentes derechos de acceso en función de su cargo, que deben ser definidos y documentados con precisión.
Para todos estos requisitos, se debe utilizar un software IAM profesional que domine todos los procesos de autenticación y autorización y garantice una administración de usuarios sin complicaciones.